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noviembre 26, 2014

Anoche me soñé muerta

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Muchos años atrás, cuando el monte estaba espeso de yerbas y matas, una tarde de octubre el burro de Sabino se había detenido frente al puente colgante del Xolotla negándose a seguir la marcha. En aquel entonces las tablas del puente estaban podridas de agua y abajo rugía el caudal repercutiendo en el pecho del indio. Su animal se puso terco y enterró los cascos decidido a no dar un paso más. Sabino, que arrastraba tradiciones ancestrales como quien arrastra su pasado, estaba preparado y no dudó: fue delante del burro y tiró con fuerza,
sin miedo,
aun sabiendo que ambos iban a morir.

noviembre 19, 2014

semilla



hay un incendio en el centro de tu nombre.
en el centro de tu nombre que digo, a viva voz, con todos mis nervios.
hay una luz y un aleteo en tu nombre que nombro; porque cada vez que digo tu nombre la noche cesa y cede a otra noche distinta.
la noche que es mi noche y la de este país devorado por las bestias y estúpidas gaviotas.
nuestro oscuro país oscureciendo.
por eso hoy digo tu nombre y tiemblo: Benjamín, Saúl, Marcial.
Abelardo, Cutberto, César, Dorian, Emiliano, Bernardo, Carlos Iván.
te nombro, te siento y siento en mí los latidos tuyos, de ti.
siento aquí la rabia, el dolor que me obliga a no callar, a decir tu nombre una vez más:  Magdaleno, Luis Ángel, José Eduardo, Abel, Adán, José Antonio, Leonel, Martín, Mauricio.
digo tu nombre que es como decir sangre, rasgadura, astilla sembrada en el ombligo de mi pueblo.
digo pueblo y es como decirte a ti, porque sé tu nombre y te nombro para nombrar este pueblo tuyo, mío, nuestro.
digo tú y es decir todos: Atenco, Aguas Blancas, San Fernando, Ciudad Juárez, Guardería ABC, Acteal, 68.
todos: amas de casa, estudiantes, jornaleros, borrachos, obreros, burócratas, vecinos, perros.de.azotea, maestros, poetas de los peces y de las lagartijas, astronautas, niños.de.la.calle.
todos nosotros juntos entorno al fuego de tu nombre, alumbrados por tu nombre que es mantra, estela de avión en el cielo de esta tierra donde te enterraron pero germinaste: semilla.
digo tu nombre y digo semilla.
y sigo: digo Christian, Jhosivani, Martín.
digo José y José y José y José. Campos, Navarrete, Bartolo, Luna.
digo tu nombre y tiemblo.
digo tu nombre y retiembla en sus centros esta mi.tu.nuestra.tierra donde te enterraron pero germinaste. semilla.
digo semilla al nombrarte.
digo semilla y te nombro. porque no hacerlo es morir, con los ojos abiertos pero morir,
respirando pero morir,
morir.me
morir.nos
morir.te
y no te quiero muerto sino vivo, como el fuego de tu nombre, como el alma de esta ciudad que tiembla hoy cuando todos decimos tu nombre: Ayotzinapa.
porque hoy decir Ayotzinapa es decirlo todo.

que se larguen todos. que nos dejen aquí, en esta lumbre, en esta tierra donde te enterraron pero floreciste: semilla.
digo Ayotzinapa y es como cambiarle el nombre al mundo.
a cada cosa del mundo.
digo Ayotzinapa y digo Alexander, Antonio, Tomas, Everardo, Felipe, Giovanni, Jesús, Jorge Luis y Jorge Luis.
digo tu nombre y digo Lorenzo, Christian, Israel e Israel, Caballero y Jacinto; digo Jonas y Jorge Álvarez y Jorge Aníbal y Julio y Luis Ángel y Marco Antonio y Miguel Ángel Hernández y Miguel Ángel Mendoza.
digo Ayotzinapa y algo se incendia.
cerca.
aquí.
en mí pecho de tierra donde te enterraron pero floreciste: semilla.


Edson Lechuga
DF nov 2014.

noviembre 18, 2014

A la opinión pública
Al rector de la UNAM, José Narro
Al Jefe de Gobierno del Distrito Federal
Al Presidente de la República
Frente a los recientes acontecimientos en Ciudad Universitaria, que culminaron con la irrupción de cientos de granaderos la noche del 15 de noviembre en un acto que violenta a todas luces la autonomía universitaria, un amplio sector de la comunidad cultural conformada por académicos, escritores, artistas y trabajadores de la cultura radicados en México y el extranjero, queremos manifestar nuestro extrañamiento y, sobre todo, nuestra creciente preocupación. En los últimos años, los estudiantes mexicanos han sido objeto de hostigamientos, persecución y detenciones arbitrarias. La desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa es el ejemplo más grave y brutal de esta persecución sistemática. Ese hecho se encuentra hoy bajo el escrutinio nacional e internacional y ha provocado una creciente toma de conciencia en la ciudadanía mexicana sobre un urgente replanteamiento de las relaciones del Estado con la sociedad. Frente a la crisis actual, no podemos permitir que la respuesta sea la represión.
La criminalización de los estudiantes y la protesta social, la intimidación y el acoso son signos peligrosos que sólo hacen crecer el conflicto. Nos preocupan e indignan las detenciones arbitrarias en el Centro Histórico y otras colonias de la ciudad de México que, en las últimas dos semanas, han sido documentadas por ciudadanos de a pie, así como la detención y secuestro del camión con 84 estudiantes de la Facultad de Derecho y Humanidades de la Universidad Veracruzana, en la autopista Xalapa-Veracruz la noche del 14 de noviembre, por policías estatales y federales, lo mismo que la presencia de granaderos en Ciudad Universitaria en un contexto explosivo y confuso un día después. Los discursos sobre la prioridad del diálogo y la procuración de justicia por parte de la clase política del país no pueden estar acompañados de signos contrarios y exigencia de mano dura. La sociedad mexicana se encuentra agraviada y exige una respuesta que finque responsabilidades y termine con la impunidad, no que amenace a la sociedad civil.
Tememos que la chispa encendida por la injusticia y el horror no sea entendida con la responsabilidad que el momento requiere y que quienes tienen la obligación de dar respuesta a la ciudadanía, empezando por el gobierno federal, violenten los derechos humanos de quienes hoy se manifiestan por estos hechos aberrantes. Del mismo modo le exigimos al gobierno del Distrito Federal que respete el libre derecho a la manifestación y detenga la política represiva hacia los estudiantes instrumentada desde los hechos del primero de diciembre del 2012.
Asimismo, llamamos al presidente Enrique Peña Nieto a presentar, a la brevedad, un informe pormenorizado sobre la cantidad de cuerpos encontrados en fosas clandestinas de todo el país. Exigimos que esos ciudadanos asesinados impunemente sean identificados y tengan pleno acceso a la justicia. Del mismo modo, exigimos la búsqueda y localización de los miles de ciudadanos que han sido desaparecidos en el país con la complicidad de autoridades municipales, estatales y federales.
Manifestamos nuestra solidaridad con los padres de los estudiantes de Ayotzinapa y reiteramos la exigencia de su presentación con vida, a 51 días de su desaparición.
Ha sido gracias al silencio cómplice que se han cometido terribles atrocidades en nuestro país. Nunca más el silencio para las víctimas silenciadas por la violencia. Llamamos a todas las organizaciones de la sociedad civil a manifestarse pacíficamente contra la violencia criminal ejercida desde el Estado.
Ayotzinapa somos todos.
México, D.F. a 16 de noviembre, 2014

Para firmar favor de enviar su nombre a cartaayotzinapa@gmail.com

noviembre 03, 2014

Raza, cáiganle a Casa Amèrica:

Altar de Muertos a Juan Gelman
Casa Amèrica Catalunya rinde tributo al Premio Cervantes, Juan Gelman. Intervienen en un coloquio sobre la obra y figura del poeta y escritor argentino el editor Alejandro García Schnetzer, el poeta Edgardo Dobry y el escritor Edson Lechuga.

http://www.americat.cat/es/altar-de-muertos-a-juan-gelman